Síndrome de Down y mascotas.

Síndrome de Down y mascotas.

Daniel fue el que encontró a Mila desde su coche el me jaló del vestido y me hizo la seña del GATO, me señaló con su dedo índice que había una pequeña bolita de pelo en la acera.

El clima estaba muy nublado, la gata muy pequeñita maullaba como llorando, desesperada de hambre y frío, algún ser cruel, la había dejado abandonada en la calle, perdida a su suerte.

Ya la lluvia estaba por caer, así que decidí rescatarla y llevarla a la casa, la coloqué en el coche junto a Daniel, y la minina dejó de maullar, el la acarició, y el resto es historia...

Mi esposo, reaccionó llegando a la casa con una taza rosada para la pequeña felina. Tuvimos que darle biberón, acunarla en nuestra cama, tenía menos de un mes de nacida, su pelaje, su diminuto tamaño, nos derritió. Era la mascota que tanto deseaba tener mi hija mayor, y se convirtió en la guardiana de la familia.

Mila ya tiene 6 años con nosotros pero el amor que nos tiene, en especial a Daniel, es fuera de éste mundo, ella cuida a su niño y se deja hacer de todo por él. Les seguiremos compartiendo videos como éste que nos ponen el corazón grandote.

Aquí les dejo a Daniel, y a Mila jugando... las mascotas ayudan a la estimulación temprana

Consejo: Si la salud de sus hijo se lo permite y no es alérgico a los gatos no dudes en regalarle el compañero más dulce que puede haber. Mila Paquita fue y sigue siendo una excelente hermanita peluda con quien aprendió a caminar. A pelear espadas, y hasta pinta con la cola de Mila.

Con Mila en casa fue mucho más fácil estimular a Daniel ya que el la persigue aún por todos lados, le ayudó a gatear, caminar y a trepar en los muebles. Son como Pan y Mantequilla.

Besos.
De Dani y Mila.

Éste BLOG forma parte de la plataforma de marketing de contenido diverso
www.madeleinecasmo.com - Content Magazine